Strangerland (2015)
A simple vista, cualquiera podría decir que Strangerland es la versión australiana y de Nicole Kidman de la película Prisoners (2013), excepto que los personajes no terminan de cuadrarme y es un poco aburrida. Si en una película presentan muchos paisajes de Australia, unos cuantos atardeceres, y mi reacción es “esta película se ve asombrosa” porque no tengo tanto interés en la trama, pues hay deficiencias con hacerme prestar atención. Dicho esto, esta película se ve asombrosa.
Una familia está en un pueblito de mierda en algún lugar de Australia y, para variar, no soy yo quien se refiere así a dicho pueblo, sino el hijo del matrimonio compuesto por Matthew (Joseph Fiennes) y Catherine Parker (Nicole Kidman). La hija mayor, Lily (Maddison Brown), parece muy contenta en compañía masculina, y de esto puedes concluir lo que quieras. El hijo menor, Tommy (Nicholas Hamilton), camina de noche por los montes cuando tiene problemas conciliando el sueño. Si por casualidad estás pensando que los cuatro tienen problemas mentales, pues estarías en lo correcto. Matthew parece un padre despreocupado con mal carácter, Catherine parece que en cualquier momento va a implosionar, Lily es ninfómana, y Tommy es menor de edad y si llegara a ser adulto posiblemente diría “mi familia está loca” mientras lame el filo de un machete.
Una noche cualquiera, y luego de que nos dicen par de pistas para adivinar que esta familia no es normal, Lily y Tommy salen a caminar para nunca más volver. Y así es como el Detective Rae (Hugo Weaving) se tiene que encargar del caso de dos niños desaparecidos en un pueblito de mierda donde todo el mundo se conoce y no parece haber vehículos. Eso es todo sobre la película, no hay más nada, ¿qué puedo decir? Una madre busca desesperadamente a sus hijos, el esposo como que no está tan interesado en encontrarlos (¿cuál es su problema?), y un detective incompetente está ahí el factor dramático que agrega.
Yo sólo me siento cautivado a medias. ¿Hacia dónde fueron los niños de noche? ¿Alguien los secuestró? ¿Por qué el idiota de Matthew no los detuvo? ¿Por qué el chamaquito se va a caminar de noche en los montes? ¿Por qué se fueron de la ciudad anterior? ¿Por qué vinieron específicamente a este monte en el culo de Australia? Algunas preguntas serán respondidas, otras no. La película hace el intento mantenernos atrapos con los misterios de la familia Parker, y las actuaciones de Nicole Kidman y Hugo Weaving contribuyen a ello, pero aún así se queda corta. Vainas pasan, no hay consecuencias, y a nadie parece importarle nada.
Para concluir, Strangerland es del tipo de película que se puede ver cuando no hay más nada que ver, pues no me parece que sea una película mala, pero tampoco una buena. No tengo más nada que hacer, ¿puedes darme una película que me guste la fotografía y la banda sonora y no me duerma con la trama? Esa es Strangerland. Nada fuera de lo ordinario.