Fighting with my Family (2019)

¿WWE haciendo películas?  ¿Soy el único que cree que eso suena como una mala idea? Oh, bueno, al menos a diferencia de Birth of the Dragon (2016), decidieron hacer una comedia que tratan de un tema que entienden muy bien, la telenovela cómica que llaman lucha libre. Fighting with my Family es primero que nada, una comedia, que se base ligeramente en hechos reales es otro tema. Como yo dejé de ver lucha libre a finales de los 90s, no tengo ni la más remota idea de quién es Paige.

Ricky (Nick Frost), Julia (Lena Headey), Zak (Jack Lowden), y Saraya (Florence Pugh) atienden el negocio familiar que es luchar con otras personas en un cuadrilátero que arman y desarman según el local donde vayan a pelear bajo la sombrilla de WAW o World Association of Wrestling. Adicionalmente, Zak y Saraya le enseñan a otros carajitos a pelear, pero no sé si éstos pagan o lo hacen para evitar que se conviertan en delincuentes. El caso es que entre estos carajitos está un ciego, y si nunca has visto a un ciego en lucha libre, pues es algo que no estaba esperando en lo absoluto.

Esta es la historia de cómo Saraya se convierte en la luchadora profesional Paige, nombre que ha copiado de una de las brujitas de Charmed y hasta tiene un póster en su habitación para demostrarlo. Para alcanzar la fama tiene que “pasar lucha”, y no es un camino fácil, y aunque se trate de una comedia, tiene sus momentos sentimentales e inspiradores.

Hutch (Vince Vaughn) es el caza talentos de la WWE y de todos los participantes que fueron a Londres, incluyendo a su hermano Zak, Paige es la única que logra entrar al programa NXT. En alguna ciudad de Florida empieza a entrenar para ser estrella de lucha libre y conoce a otras divas, que a simple vista sólo parecen muñecas vacías pero demuestran que tienen un chin más de sustancia de lo que uno esperaba. Como Hutch también es el entrenador de los luchadores de NXT, pues yo sólo podía pensar en Vince Vaughb en Hacksaw Ridge (2016).

Para concluir, Fighting with my Family es divertida porque ese es el trabajo de una comedia, y si lo que buscas una película más apegada a la realidad, pues busca en otro lado. No podía dejar de pensar en que Jack Lowden se parece a Simon Pegg, el mejor amigo de Nick Frost.