The Secret Life of Walter Mitty (2013)

The Secret Life of Walter Mitty es una de esas comedias ligeras que no se complica con una trama muy elaborada, sino que intenta ser alegre y darle esperanzas a la audiencia de que todo puede pasar. No se trata de un soñador realizando sus sueños, ni de hacer algo imposible para impresionar a la chica bonita de la oficina, ni mucho menos de anteponerse a la adversidad, sino más bien de vivir, seguir adelante, y de vez en cuando embarcarse en una aventura sólo porque sí. Así es el eslogan de la revista “Life” que usan en esta película.

Ben Stiller interpreta al personaje titular de esta película, Walter Mitty, quien es sólo un sujeto ordinario que no ha hecho gran cosa con su vida, y su más reciente oficio es acechar a una de las nuevas empleadas de la revista “Life” por medio de su cuenta de eHarmony. Esta mujer es Cheryl Melhoff (Kristen Wiig), quien tiene un perro de tres patas, y un hijo, y es la razón principal por la que nuestro protagonista Walter Mitty sueña despierto. Indudablemente, estos sueños son los que inspiran a Walter a iniciar su aventura, y es en éstos donde creo que la gente tendrá sus diferencias.

Me parece que en su mayoría estos sueños son fascinantes porque muestran ideas que el protagonista imagina, sea ser un superhéroe o decirle al jefe zopenco del mal que se va a morir. Y NO, NO ES NINGUNA ENFERMEDAD MENTAL, ASÍ QUE NO CREAS QUE NECESITO VISITAR A UN PSIQUIATRA. Sin embargo, no creo que sean efectivamente cómicos si quien ve este filme no se identifica de una manera u otra con Walter Mitty. Bien, pues admito que fui con bajas expectativas,y quizás por eso me gustó que al principio se esfuerzaran en hacernos ver que las fantasías de Walter son parte importante de él, y a medida que avanza la película estas fantasías son cada vez menos frecuentes porque el personaje se enfoca en –y vuelvo y repito– vivir. Así como GLaDOS al final de la primera Portal.

Para sorpresa de todos los empleados de la revista, ésta ha sido comprada por alguna otra compañía siniestra, y el enfoque principal es en los despidos masivos para deshacerse de la versión impresa y convertirse completamente en una publicación digital. De aquí es que surge la idea de que una de las fotografías de Sean O’Connell (Sean Penn) debería de usarse para la portada del último número impreso de “Life“. Esta es la fotografía #25, la cual el administrador de negativos, nada más que Walter Mitty, no encuentra por ningún lado. Los niños hoy en día nunca sabrán lo que son los negativos de las fotografía. Mucho menos si uno de estos niños es el director general encargado de la adquisión y liquidación de “Life“, el cretino Ted Hendricks con su estúpida barbita (Adam Scott).

Finalmente, la película tiene buena fotografía, y se ve sorprendentemente bien para ser una comedia ligera. Los ángulos de cámara fueron bien manejados para mostrarnos la escenografía, y también para esconder el rostro del doble de Ben Stiller haciendo cosas que sólo le dejaríamos a Tony Hawk. La selección musical fue interesante, y me gustó bastante. Esta película me recuerda que estoy envejeciendo y que, mientras que Walter Mitty puede escapar su trabajo y embarcarse en una aventura sin consecuencias, yo estaré atrapado soñando despierto dedicándole días de mi vida a un blog con un pollo en el logo.

Life

“To see the world, things dangerous to come to, to see behind walls, draw closer,to find each other and to feel. That is the purpose of life.“