The Last Witch Hunter (2015)
El último cazador de brujas

Hay películas que los actores hacen sólo para ganar dinero y pagar sus facturas, porque si es para ganar fama o darse a conocer en el mundo cinematográfico, están perdiendo su tiempo. El ejemplo de The Last Witch Hunter usa a Vin Diesel para vender una película que está floja en todos los sentidos, pero que Michael Caine, Elijah Wood y Rose Leslie aprovechan para hacer dinero.
The Last Witch Hunter empieza en algún lugar del siglo XIII, en el que se cazaban brujas. No estamos hablando de mi primera ex-esposa, sino de entidades malignas que quieren acabar con la humanidad… al igual que lo haría mi primera ex-esposa si tuviera magia. ¿Ves? Son diferentes. El caso es que en un árbol maldito está la Bruja Reina (Julie Engelbrecht), y el objetivo de un grupo de aventureros (?) es acabarla porque ésta ha esparcido la peste negra por toda Europa.
Entre este grupo de héroes está Kaulder (Vin Diesel), quien logra matar a dicha bruja y a cambio ésta lo maldice dándole inmortalidad en lugar de matarlo de una mirada como a los otros perdedores. ¿Inmortalidad, dices? Ya vamos por mal camino. Chorrocientos años desde ese evento, en el presente Kaulder es el arma de la organización religiosa “Hacha y Cruz”, el último cazador de brujas del siglo XIII, quien se encarga por mantener a las nuevas generaciones de brujas a raya para que no se atrevan a usar sus poderes en perjuicio de la humanidad. Por supuesto, hay quienes desean que Trujillo la Bruja Reina vuelva a gobernar, y Vin Diesel está en el medio de sus planes.
Me agrada la idea de que hayan creado un mundo (otro más) en el que la magia se usa clandestinamente y haya una organización intentando mantener el orden. El problema es que el único cazador de brujas (y de ahí el título) es Vin Diesel, y éste no pasa mucho tiempo cazándolas ni combatiéndolas, sino más bien dando explicaciones acerca de cómo funciona este mundo. Entonces cuando finalmente llega la hora de un combate o una pelea, toman un atajo por el departamento de efectos visuales y el de edición, y las secuencias quedan horribles. Vamos, Vin Diesel, tira un “Persuasion Check” a ver si me convences de que en verdad estás trabajando para ganarte el pan de cada día.
El culto llamado “Hacha y Cruz” tiene a un encargado de acompañar y escribir las aventuras de Kaulder. Como este es un trabajo de simples mortales, el 36to. Dolan (Michael Caine) va a retirarse luego de 50 años en el cargo para para darle paso al 37mo. Dolan (Elijah Wood). Me parece que Elijah Wood es quien está haciendo el mayor esfuerzo para impulsar su carrera artística. Adicionalmente, está la bruja Chloe (Rose Leslie), que por su cuenta estaría bien pero de alguna manera alguien convenció a los guionistas de que ella debe de interesarse románticamente por Kaulder. ¿Pero qué diablos? ¿Por qué no podía quedarse como la bruja patea-traseros sin ningún interés en Vin Diesel?
Para concluir, no me parece que The Last Witch Hunter sea una película tan mala. Tiene sus defectos, pero es una película que resulta entretenida si te desconectas del mundo por hora y media y no tienes nada mejor que hacer.