Liz en Septiembre (2014)
Antes de que empezara la función de Liz en Septiembre han invidado a Mimí Lazo (una de las acttrices de la película) para que dijera algunas palabras sobre la película y lo que es estar en Dominicana. Pues bien, yo sólo recuerdo las frases de que “esta es una película muy bonita” y que “todo el mundo tiene el derecho a amar a quien uno quiera, a vivir como uno quiera, y a morir como uno quiera”. Ya cualquiera puede suponer que se trata de homosexualidad, libertad, una enfermedad fatal, y eutanasia, ¿verdad?
Eva (Eloisa Maturen) tiene problemas durmiendo porque los cuernos que tiene chocan contra el espaldar de la cama. A su esposo se le ha presentado una situación que incluye la instalación de susodichos cuernos, por lo que Eva tendrá que adelantarse sola al hotel donde tenían planeado pasar el fin de semana (o la cantidad de días que fuere). Así comienza la aventura de Eva a algún lugar de Venezuela donde hay playa, pero su carro se avería al pasar sobre un hoyo. Ese carro no duraría un día en las calles de Dominicana. El mecánico local le dice que el motor está fundido, que todos los hoteles están llenos, y que si quiere pasar la noche su única opción es donde Margot. Eso te dice que no sólo en Dominicana los mecánicos son unos charlatanes.
Con un nombre como “Conejo Azul”, la posada de Margot (Elba Escobar) no es lo que uno se espera o quizás sí lo sea. Yo no sé lo que estás pensando. Aquí conoce a un grupo de mujeres entre las que están la Dra. Dolores Jahn (Mimí Lazo), Coqui (Danay Garcia), Any (Arlette Torres) y Alex (María Luisa Flores). Sin embargo, la que más sobresale entre ellas por ser “diferente” es una tal Liz (Patricia Velasquez). Dicho de otro modo, Liz es el personaje del título “Liz en Septiembre“, aunque sinceramente no entiendo la parte de “en Septiembre” (y para eso está la interné).
Cuando se refieren a Liz como “diferente” no se refieren al hecho de que sea gay, sino más bien a que su personalidad es más intensa e independiente que las demás, por ejemplo, se va a pescar, a bucear, nada y corre más rápido que las demás, y es tremenda mujeriega. Así entramos un poco en la vida de Liz para conocerla a través de los ojos de Eva y el grupo de mujeres. Si no sabes por dónde va esto, te exhorto a que vuelva a leer el primer párrafo.
Liz en Septiembre es una película para pasar el rato que toca ciertos temas delicados que todavía pueden considerarse tabú, no es una película aburrida ni tampoco es mala. Sin embargo, no siento el deseo de volverla a ver. Quizás en la comunidad LGBT tenga más acogida porque no muestran a estas mujeres en un entorno de discriminación y persecución, sino en un lugar donde pueden ser libres, pero lo más importante es que son seres humanos con sus cualidades y defectos.