Nightbooks (2021)
Cuentos al caer la noche
Nightbooks es el tipo de películas que veías cuando eras menor de edad cuando esperabas que dieran películas de terror cuando llegaba el Viernes 13, pero que ahora no tienes la edad para esas tonterías y simplemente te preguntas ¿qué es lo que están intentando hacer? Obviamente, yo que estoy viejo, barbudo, y canoso, solamente quería que el carajito dejara de gritar, pero quizás si tuviera 50 años menos estaría gritando igual que éste. Quizás.
Nightbooks se basa en el libro del mismo nombre de J.A. White, y que no tengo interés en leer a menos que me toque hacer de niñero. El caso es que la película empieza con Alex (Winslow Fegley) haciendo una rabieta, y los padres más despistados del mundo no se dan cuenta cuando éste se va del apartamento. Alex llega a otro apartamento misterioso que tiene una película de terror, su género favorito, y lo hipnotiza para que entre a la guarida de la bruja.
La bruja en cuestión es Natacha (Krysten Ritter), quien usa toda su experiencia de jevita desagradable en otras películas para interpretar a esta bruja mala. El apartamento donde vive como que se gobierna, y lo que Natacha quiere es que Alex le lea un cuento de terror todas las noches. Se nota que Krysten Ritter está disfrutando hacer algo diferente a Jessica Jones. Adicionalmente, en el apartamento infernal vive una jevita llamada Yasmin (Lidya Jewett), quien es la que le hace la cena a la bruja Natacha. También hay una gata llamada Lenore, y no sé si es porque usan a varias gatas para un solo rol pero a veces se ve como si fuera generada a computadora.
Obviamente, la trama consiste en salir del apartamento infernal este, y los carajitos tienen que ingeniársela porque, como ya dije antes, el apartamento se gobierna. Yasmin prácticamente se la pasa diciendo que hay cosas peores que la muerte, y Alex se la pasa gritando por cualquier cosa. Y la gata Lenore no tiene oficio–es una gata– y por eso se la pasa embromando la paciencia. También aparecen unas arañas feas cuya participación es para avanzar la trama porque de lo contrario no terminarían nunca.
Ahora, lo que uno quiere ver es cómo Alex se inventa cuentos de terror. Alex tiene una especie de diario, al que llama Nightbooks, donde describe sus cuentos de terror, y por supuesto, estamos invitados a ser testigos de lo que le cuenta a la bruja en par de ocasiones. Y bueno, no tengo nada que decir.
Tengo un montón de pregunta, pero la película no es capaz de responderlas, así que creo que estoy condenado a leer el libro a ver si abarcan más con el tema. Si tengo que resumirlas, pues serían solamente dos: ¿La gente envejece dentro del apartamento infernal? ¿Cuánto tiempo tiene Yasmin viviendo con la bruja? Son preguntas simples que parten de Natacha decir “tengo años diciéndolo” sobre algo que dijo Yasmin sobre ser torpe o incompetente para evitar ser castigada. En fin.
Para concluir, Nightbooks no es el tipo de películas de terror que yo vería, de hecho, yo no vería ninguna película de terror, pero cuando se trata de películas de horror dirigida a carajitos, pues es regular, no es buena, no es mala, es regular. Yo no pude verla completa en una sola sentada, así que cada quien con su tema.