Mainstream (2021)
Con el trailer de Mainstream lo que estaba pensando es que es una especie de parodia al estilo Popstar: Never Stop Never Stopping (2016), y en cierta manera se ridiculiza las estrellas de los medios sociales, y al igual que la mayoría de las películas satíricas, no es cómica y es igual de vacía que el tema del cual se burla. Entiendo lo que estaban intentando hacer y me hizo pensar que tenían un buen mensaje, pero entonces no llegan a nada.
La película empieza con la decisión artística de poner letras en pantallas como si se tratara de cine mudo, y nos introducen a Frankie (Maya Hawke), una jevita que trabaja en un bar de mala muerte en Los Ángeles, California, y se dedica a buscar cosas para rodar y subirlas a YouTube con la finalidad de atrapar los ojos de la gente. Su compañero de trabajo es Jake (Nat Wolff), quien siempre la apoya en lo que sea. Sabemos que Jake está aficiao de Frankie, y que el caso inverso no aplica.
Un día cualquiera Frankie se encuentra a Link (Andrew Garfield), un carismático y excéntrico personaje vestido de ratón que no tiene un celular. Así Frankie ve una oportunidad de cautivar los ojos de la gente que visita YouTube con una especie de filósofo-farsante que llama la atención con su excentricidad. De paso involucran a Jake para que escriba los libretos de los videos. De la noche a la mañana han logrado conseguir un montón de seguidores y un tal Mark Schwartz (Jason Schwartzman) se presta a representarlos para conseguirles más dinero. El lado económico del estrellato casi no lo tocan, en cambio en lo que enfocan su atención es en la fama, que es producto de criticar la misma plataforma o el mismo medio que están usando para conseguirla.
Andrew Garfield interpreta a un carismático charlatán mientras que Maya Hawke está intentando buscar su lugar en el mundo, y Nat Wolff es subutilizado como la tercera rueda de la fama youtubística. Se puede apreciar las decisiones que tomaron para hacer la película, como la paleta de colores, la fotografía, la banda sonora, la inserción de emojis porque sí, y el tema que intenta decirnos algo importante pero no termina de cuajar la idea porque el personaje de Link se vuelve peor. Link se convierte en el mismo villano del cual se estaba burlando al principio de su carrera. La culminación de esto es el monólogo final que encarna todo lo que está mal con esta cultura de buscar fama a como dé lugar. ¿Y entonces qué?
No puedo responder a esa pregunta porque yo simplemente no lo sé, Gia Coppola no nos da una mano con esto, y sólo queda asumir que personajes disparatosos seguirán haciendo disparates que le gustará a mucha gente, mientras que tú eres un extraterrestre incapaz de entender cómo la gente pierde su tiempo en esto. Lo mismo pasa con mucha de la música que la gente oye, que para mí es ruido con autotune, así que honestamente, no tengo la respuesta a lo que pasa después de los créditos. Y quizás no saber no es tan malo pues no es el tipo de persona que yo me inclinaría a seguir en primer lugar, así que lo que pase después realmente no me afecta. El detalle es que esta es una película, y el mensaje es que para seguir adelante uno tiene que ser narcisista.
Para concluir, Mainstream no es mi tacita de té, y al principio creía que había una oportunidad de que la película se tratara de hacer mejores personas, pero no, es más de lo que no necesito en mi vida.