Escape Plan (2013)

¿Cuáles razones hay para ver una película como Escape Plan? Yo puedo darte dos: 1) Sylvester Stallone, y 2) Arnold Schwarzenegger. Esta es la primeza vez que estos dos señores protagonizan una película juntos, y una que todos los amantes de las películas de acción de las décadas de 1980 y 1990 hemos estado esperando (por definición, The Expendables y secuelas no cuentan). Así que a nadie debería de sorprenderle lo que puede encontrarse en esta película.

“¿Y qué es esto?”, pregunta un amable lector. La respuesta es la misma que vas a encontrar en la mayoría de las películas de acción de alguno de estos dos señores:

1. Una trama que no necesariamente tiene sentido
2. Unos villanos que tienen aún menos sentido
3. Nadie lleva un conteo de las municiones que usan las armas, por lo que son infinitas
4. Los malos tienen mala puntería, fallan en un 99% de los casos, y los buenos casi siempre aciertan sus disparos
5. Peleas cuerpo a cuerpo
6. Al menos una línea cómica (o one-liner) por parte de Arnold Chucheniguel

 
Dicho esto, disfruté Escape Plan porque esto mismo era lo que estaba esperando ver. Si Estalón y Chuarcheniguel están en una prisión y quieren salir de ésta, no van a salir a escondidas y sigilosamente, no-no-no-no-no, van a buscar una forma ruidosa y violenta para su escape. Adicionalmente, ambos interpretan personajes diferentes a sus típicos soldados/policías/agentes que sólo recibían órdenes, y ahora tienen que elaborar un plan para salir de la prisión más segura y secreta del mundo.

Ray Breslin (Sylvester Stallone) es el más verdugo cuando el tema es la securidad de prisiones, y su trabajo es ir a una prisión como un reo y desde adentro buscar la manera de fugarse. Si crees que él va a enseñarte a escapar de una prisión, pues entonces no debiste haberte fumado esa yerba antes de la película. A pesar de haber escrito el mejor libro del mundo en cuanto a materia de securidad de prisiones se refiere, nadie parece reconocer al Sr. Breslin físicamente, por lo que siempre se sale con la suya y cobra una cuantiosa suma de dinero por su trabajo. Su próximo trabajo para la CIA involucra escaparse de un prototipo de prisión al que nadie debe saber su ubicación, incluyendo su equipo de trabajo.

El equipo de trabajo de Ray Breslin está compuesto por Curtis “50 Cent” Jackson, quien trabaja con computadoras porque no gana suficiente como rapero; Abigail (Amy Ryan), que dice ser mujer pero es terrible cocinera; y Lester Clark (Vincent D’Onofrio), quien sólo está de paso y echando a perder su talento porque lo único característico de su personaje es la misofobia. Ninguno de estos me importa, así que olvidémonos de ellos y hablemos de la prisión.

En el prototipo de prisión es donde Breslin conocerá a un alegre y servicial Emil Rottmayer (Arnold Schwarzenegger). Como Rottmayer no tiene ni la más remota idea de cómo salir de esta prisión, Breslin le dedica una buena parte de la película a explicarle cómo rayos piensa salir, a cambio de que lo ayude a llevar a cabo su plan. En todo esto ocurren las jabladurías  de siempre y unas cuantas nuevas, y era de esperarse. Sin embargo, nada de esto podía prepararme para el momento en que Chucheniguel recitara el “Padre Nuestro” en alemán. No me importa lo que la gente diga, esto es gracioso.

El caso es que la prisión se hizo con la finalidad de detener a los indeseables, independientemente de si son criminales o no. El lugar perfecto donde enviaría a mi primera ex-esposa de vacaciones. El encargado de diseñar y manejar este complejo penitenciario es un tal Hobbes (Jim Caviezel), quien es un psicópata con una colección de mariposas, además de ser un tipo raro que manosea la cabeza del subordinado más cercano al control de las cámaras. Físicamente, este señor me recuerda demasiado a un buen amigo mío que usa el pseudónimo “Hobbes” (por las tiras cómicas de Calvin & Hobbes), cuyo nombre voy a omitir y espero no ofender si algún día leyera esto.

Para concluir, absolutamente nadie va a ganar ningún premio por esta película, la trama de por sí es ridículamente predecible, y el personaje de Stallone parece que obtiene su conocimiento del aire. Sin embargo, esto no impide que pase un buen rato viéndola porque sabía muy bien a lo que iba. Me hubiese gustado que hubieran excluido a algunos personajes que no hacen casi nada, y que no movieran tanto las cámaras cuando estaban peleando en la prisión. Por todo lo demás, mientras más cursi y exagerada, mejor.

— You hit like a vegeratian. (Golpeas como un vegetariano)